Recientemente esta nación fue la anfitriona del foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico, APEC. Este país ha recorrido un largo camino desde la guerra que terminó hace más de 40 años. Pero actualmente, no solo su economía está en crecimiento, sino que también la Iglesia experimenta un desarrollo continúo en el país comunista.
Vietnam es ahora la economía que más exporta en el mundo y Estados Unidos es uno de sus principales socios. Los bienes inmuebles también están en apogeo y la modernización está en todas partes.
La última vez que estuve en la ciudad de Ho Chi Minh fue hace 8 años. En aquel entonces apenas había un automóvil en la carretera. La gente andaba en motocicletas y bicicletas. Pero hoy vemos las calles congestionadas de automóviles, hay muchos edificios y muchas obras en construcción … Todo muestra el rápido desarrollo entre las ciudades de Vietnam.
No solo los negocios florecen en Vietnam, las iglesias también están brotando. Miles de cristianos de más de 50 denominaciones celebraron los 500 años de la Reforma Protestante, realizada recientemente en Ho Chi Minh. El pastor Daniel Pham, dice que el encuentro fue muy exitoso a medida que se mostró la unidad entre las iglesias. Fue también una firma del creciente número de vietnamitas que se han abierto al evangelio.
“La comunidad ve que cuando la gente viene a Cristo su vida cambia. Otro factor es que la iglesia está más involucrada ahora en la comunidad”, dice Pham. Incluso ahora los creyentes son propietarios de negocios. Como esta cafetería llamada “café fresco”, que pertenece a un exitoso hombre de negocios cristiano. Su administrador, George Vo, comparte cómo el negocio creció después de que el dueño lo dedicó a la obra de Dios. El negocio empezó con cinco carritos de café, vendiendo el producto en las calles.
“Cuando se hizo famoso, el dueño decidió construir una cafetería para que más personas pudieran disfrutar nuestro café. Pero, se comprometió a dar toda la ganancia neta al avance del reino de Dios. Y Dios bendijo mucho más a Café Fresco. Abrimos otro local y Dios continuó bendiciendo no solo el negocio, sino nuestras vidas también”, indica Vo.
Tener este tipo de compromiso al evangelio fue el reto hecho por uno de los líderes claves de Vietnam, en el aniversario de 500 años de la reforma.
El Dr. Duc Nguyen dedicó su vida a promover la unidad entre iglesias alrededor del mundo. Dijo que es importante que los cristianos se amen mutuamente, para que la gente crea más fácilmente en el evangelio. Su mensaje fue de mayor impacto cuando, dos días después del evento, murió de un infarto.
“Él fue feliz, porque dijo: ‘Mi sueño es ver la iglesia en unidad’. Muchas personas dijeron: ‘Quiero su vida’. Creo que fue muy significativo. Cumplió su sueño antes de estar con el Señor”, precisa Pham.
