Hoy en día la adicción no solamente se trata de alcohol, drogas, pornografía o de otros temas, la tecnología se suma como una de las grandes adicciones de pequeños, adolescentes y adultos. Muchas personas ignoran este tema porque no creen que se trate de gran importancia colocar de prioridad el teléfono celular, la lapto, tablet, computadora o cualquier aparato electrónico.
¿Sabes lo que es una adicción?, se trata de estar inmerso en aquello que creemos es importante para nosotros y no podemos renunciar, aunque sea perjudicial para nuestras vidas. Esa situación coloca a Dios es un segundo plano, no permitiendo que él este en el primer lugar en todas las cosas que emprendemos.
En Proverbios 3:7 dice: “No seas sabio en tu propia opinión; más bien, teme al Señor y huye del mal”. Nuestro Padre celestial es claro en varios versículos de la Biblia en llamar la atención de aquellos que están haciendo mal, aunque crean que es lo correcto, o a través de las excusas de no poder retirarse a tiempo.
Lo que puede ayudarte a mantener el control es Dios, es el único capaz de sanarte y de convertirse en tu mejor aliado, pero el él nos dio el libre albedrío y es nuestra decisión terminar con la adicción. La tecnología en términos regulares no es negativa, debemos utilizarla de la mejor manera, en temas que nos edifiquen, un ejemplo de ello es convertirla en nuestra aliada para compartir el evangelio.
Para todo en esta vida hay tiempo, por ello es necesario que la tecnología sea regulada a través de horas específicas que no nos afecte nuestro diario vivir, recuerda que Dios está en primer lugar en la vida de cada uno de nosotros y es en él en lo que debemos concentrarnos, así como en edificar nuestra familia.
Por Andreina Fersaca
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