La Biblia nos enseña que Dios tiene un buen plan para todos aquellos que ponen su fe en Jesucristo. Su plan es perfecto, y llevará a todo el que lo siga a una vida en abundancia. Para cumplir su voluntad es importan escuchar su voz y ser guiados por Él.
Muchas personas piensan al escuchar la frase “oír la voz de Dios” que es escucharlo solamente de forma audible y nuestros Señor habla de distintas maneras, pero es importante estar apercibidos a sus instrucciones y a los regalos que Él nos quiere dar.
Para oír la voz de Dios no se necesita una voz como de trueno que nos hable directamente desde el cielo, sino más bien situaciones, palabras, frases, o diferentes experiencias que viviremos día a día en donde la voz de Dios es clara para nuestra vida.
Dios nos habla de muchas maneras, a través de su Palabra, naturaleza, gente, circunstancias, paz, sabiduría, intervención sobrenatural, sueños, visiones, alabanzas, y otras miles, Él nos conoce mejor que nadie y siempre sabrá la mejor manera de hablarnos para que cada uno de nosotros sepa que se trata de Él que nos está guiando.
- Leyendo la Biblia: Cuando leemos la Biblia debemos estar atentos al Espíritu Santo. A veces Dios ilumina un versículo o pasaje en nuestro corazón para indicarnos Su voluntad. De pronto se destacan palabras que parecen hablarnos directa y personalmente.
No olvides anotar este versículo y meditar en ello.
- Paz Interna: Cuando se presentan dos decisiones difíciles, la paz de Dios que normalmente gobierna en nuestros corazones nos puede ayudar a discernir Su voluntad. Esa pasa que sobrepasa todo entendimiento humano llegará a nuestro corazón y entenderemos cual es la voluntad de Dios, siguiendo su Palabra y sus mandamientos.
- Consejos Pastorales: El mejor consejero pastoral es aquel que ayuda al creyente a oír a Dios por sí mismo. «Mis ovejas oyen mi voz…» (Jn 10.27). Muchas veces nuestros pastores, mentores, guías, líderes, nos ayudan en oración y guían a escuchar la voz de Dios.
Muchas personas creen que Dios no les habla, pero en muchas ocasiones algunos por sentirse tan atribulados en medio de las situaciones en su vida no pueden escucharlo. En Proverbios 1:24 dice: “Yo los llamo, pero ustedes no me responden; les hago señas, pero ustedes no me hacen caso”. Eso es lo que ocurre muchas veces, Dios está constantemente hablándonos y nosotros no respondemos
Hoy es un excelente día para comenzar a escuchar la voz de Dios, si le pedimos que nos hable y nos dé respuestas a nuestras peticiones seguro Él lo hará en su tiempo perfecto, no endurezca tu corazón a su Palabra y a su mandato. La voz de Dios es clara, es hermosa y será la mejor guía que tendremos en nuestro camino.
Por Andreina Fersaca