La verdad es que cada uno de nosotros, en todas partes, esperamos por algo. Puede suceder de que un cristiano ya tenga todo lo que desea en esta tierra, pero aún así está esperando el regreso de nuestro Señor Jesucristo. Pero, la mayoría de nosotros esperamos por el cumplimiento de un sueño, una fecha, un matrimonio, un hijo, por el día de ver alguna promesa de Dios establecida en nuestras vidas.
Las historias de la Biblia también nos alientan a mantener firme la razón de nuestra esperanza. La fidelidad de Dios es comprobada a través su Palabra que nos guía a esperar siempre en Él. Esta es la historia de Abraham, que tuvo en nosotros la promesa cumplida de ver a todas las familias de la tierra bendecidas por causa de su jornada con Dios (Hebreus 6.13-19).
Esto también nos recuerda el mensaje que el apóstol Pablo escribe en la carta a los Romanos. En el pasaje, somos alentados a permanecer «gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración.» (Romanos 12.12)
Los cristianos perseguidos igualmente conservan la esperanza por días mejores. Así como nosotros, ellos también esperan por todo lo que estamos esperando. Pero, su testimonio de fe es una herramienta poderosa para enseñarnos.
YYana es una de las madres que tuvo su hija secuestrada en Chibok, Nigeria. En febrero de 2014, extremistas de Boko Haram llevaron a Rifaktu, una joven totalmente dedicada a su familia, sirviendo de ejemplo cristiano a sus hermanas. Junto a ella, cientos de jóvenes están en cautiverio. A los papás y mamás, queda la esperanza por un milagro de parte de Dios. A través de tu donación, estas familias han recibido aliento y esperanza. Entérate de lo que Dios está haciendo en Nigeria en este video.