Pueblo unido en oración por Hawái luego de que un volcán hiciera erupción

Desastres naturales están ocurriendo en Hawái y líderes cristianos han manifestado no sólo su apoyo a los residentes de esta isla, si no la unión en oración de todos los que creen que Dios puede manifestar su Poder y su Gloria en momentos en angustia.

Hawái vive ahora una de las peores catástrofes, más de 1.700 habitantes tuvieron que ser evacuados de sus viviendas luego de que el volcán Kilauea, uno de los volcanes más activos del mundo, hiciera una erupción masiva, lo que hizo que se desbordara lava fundida a través de tierras boscosas y carreteras pavimentadas.

Pero antes de que esta situación ocurriera, ya el suelo había empezado a colapsar por los cráteres que causaron varios terremotos que anunciaba le erupción del volcán. La actividad sísmica ya estaba en curso y la devastación estaba cerca.

Según el medio local Newa 1130, los funcionarios de rescate no pudieron estimar cuánto duraría la erupción, lo que provocó que el gobernador de Hawái, David Ige, acudiera a la Guardia Nacional para ayudar en las evacuaciones y brindar seguridad a unas 770 estructuras abandonadas, mientras los residentes están albergados en refugios.

La autoridad gubernamental advirtió a los habitantes para que presten atención a las advertencias de la Defensa Civil. «Por favor estén en alerta y preparados para mantener a salvo a sus familias», escribió en su cuenta Twitter. Ige aseguró que el incidente es similar al ocurrido en 1960 con el volcán Kapoho, cuya erupción causó numerosos daños.

Actualmente Hawái está declarado en estado de emergencia.

Oración en común acuerdo

Uno de los líderes cristianos que se manifestó sobre lo que está aconteciendo en la isla de Hawái es el evangelista Franklin Graham, quien es presidente de la Asociación Evangelística Billy Graham, quien viajó para observar el daño de primera mano.

«He visto la tremenda cantidad de daños que enfrentan las familias en Kauai después de que lluvias torrenciales inundaron cientos de hogares, provocaron aludes de lodo y arrasaron las carreteras», dijo Graham. «Estamos aquí para compartir el amor de Jesucristo con las familias necesitadas ayudándoles a recuperarse físicamente y recordándoles que no están solos».

La solicitud es una oración permanente por Hawaí, par que Dios se Glorifique en ese lugar y proteja a todas las familias que allí habitan.

Por Andreina Fersaca