El reconocido pastor y autor cristiano Max Lucado participó en una vigilia de oración en Texas el pasado miércoles, en medio de una serie de protestas que afectaron al país, luego de conocerse la muerte del afroamericano George Floyd en manos de la policia.
Max Lucado es pastor de la Iglesia Oak Hills y autor de diversos libros y devocionales, tomó su página de Facebook para publicar videos de una vigilia de oración a la que asistió en el Parque Travis del centro de San Antonio, junto a cientos de personas. Travs Park ha sido estas últimas semanas el lugar de manifestaciones en contra del abuso policial.
“Realmente desearía que pudieras estar aquí con nosotros adorando a Jesús en San Antonio”, dijo al comienzo de un video Lucado, y agregó que la multitud y la banda de adoración estaban “dando gloria a Dios”.
Por su parte, los manifestantes participaron en la noche de oración y adoración para lamentar la pérdida de Floyd, de 46 años de edad, cuya muerte fue conocida a nivel mundial, tras estar bajo custodia de la policia de Minneapolis, Minnesota, provocando fuertes protestas, violencias y saqueos.
La vigilia estuvo bajo la organización de la Iglesia Bíblica Comunitaria de San Antonio, una de las congregaciones más grandes de San Antonio, junto a otras iglesia de la localidad. Esta vigilia se produce cuando otras vigilias pacíficas de oración se han llevado a cabo en todo el país en los últimos días después de la muerte de Floyd.
El Pastor Lucado fue uno de varios líderes que hablaron y oraron junto a los presentes durante la reunión. En medio de su mensaje de reflexión citó Lucas 4 para señalar que Dios envió a Cristo para sanar a los quebrantados de corazón, liberar a todos los oprimidos.
“Donde está Jesús, los que están traumatizados encuentran esperanza, encuentran un nuevo comienzo, encuentran un nuevo comienzo”, dijo. “Donde está Jesús, cada persona es valorada, se declara el Evangelio”.
“El resto de la sociedad está estresada, abandonando el barco, alejándose, tirando la toalla, enojado, amargando el uno al otro”, dijo Lucado. “Necesitamos desesperadamente que unas pocas personas llenas de espíritu, amantes de Jesús y temerosas de Dios se vuelvan a Cristo y digan: ‘Cristo, solo ayúdanos’. Mi nombre está en esa lista. Espero que el tuyo también lo esté porque Él lo hará y Él podrá”.
Por Rossmary Valladares
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