Frente a los hechos ocurridos este jueves en Culiacán, Sinaloa, la Iglesia Nacional Presbiteriana de México emitió un comunicado donde hace un llamado a la oración e intercesión tras los hechos de violencia ocurridos recientemente en el país. La misiva con número 0022-17-10-2019, especifica: donde lamentablemente algunos hermanos de nuestras iglesias y de otras denominaciones han sido afectadas al grado de perder la vida por encontrarse en el lugar y momento equivocado, muchas familias han vivido esta tragedia.
Por su parte, el pastor Baltazar Zamora, funcionario de El Concilio Nacional de las Asambleas de Dios en México y quien radica en Culiacán, lamentó los hechos ocurridos y mencionó: en mercados, centros comerciales y de convenciones, la orden fue quedarse en el sitio, allí se les proveyó alimentos y resguardo por parte de las autoridades. En cuanto a los pastores nos informan que tanto sus familias como la de sus feligreses no hay reporte de algún incidente.
En el ámbito religioso, Culiacán cuenta con 12 iglesias de las Asambleas de Dios, pero hay más 110 iglesias representadas por la Alianza de Pastores de acuerdo al pastor Juan Carlos Pérez Navidad, presidente de la Alianza, quien además comentó que pastores de la ciudad han informado que no hay incidentes y aseveró: no somos indiferentes a la situación y seguiremos motivando a interceder por Culiacán y a participar en las convocatorias de las autoridades para pacificar esta ciudad.
En Sinaloa, líderes de diferentes denominaciones trabajan con el Consejo Interreligioso a nivel estatal donde colaboran las iglesias de Asambleas de Dios, Iglesia de Dios, Iglesia Apostólica, la Luz del Mundo, la Iglesia Católica por medio del P. Miguel Angel Soto, entre otras iglesias independientes para tratar temas como el aborto, Derechos Humanos y libertad religiosa, entre otros en el espectro de valores.
Cirilo Cruz, presidente de CONEMEX, dijo que es necesario orar por la nación y junto con las Iglesias trabajar por la pacificación del país a través del diálogo con las autoridades de todos los niveles, enfatizó que por medio de la predicación de la Palabra de Dios y un plan estratégico enfocado en el tema de la familia, debemos impulsar a los jóvenes a reincorporarse a sus estudios, a integrar valores que construyan modelos de ciudadanía que aporten valor a la sociedad.
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