Diferentes iglesias en Corea del Sur reanudaron sus servicios el pasado domingo, luego de casi dos meses suspendidos por el coronavirus. Las autoridades han decidido levantar progresivamente las directrices de distanciamiento social, permitiendo bajo ciertas normas que las iglesias reabran sus puertas.
La decisión se produjo como parte de unas medidas para aliviar las restricciones en la ciudadanía, en donde los casos de coronavirus se han mantenido por debajo de los 20 en los últimos días. Sin embargo, los asistentes deberán usar mascarillas faciales, así como medir la temperatura corporal y mantener una distancia de al menos un metro entre los asientos.
En el país asiático existe una política de distanciamiento social hasta el 5 de mayo, pero el gobierno ha concedido un cierto alivio a entidades religiosas y a organizaciones deportivas.
Según Reuters, una de las iglesias más grandes de Seúl, la Iglesia de Onnuri; limitó la asistencia a 700 personas a pesar de contar con una capacidad para 3000. Además, los miembros deberán inscribirse en línea antes del servicio y sentarse en los asientos designados para cumplir con la distancia segura entre las personas.
Cabe señalar que aunque las iglesias empiezan a abrir, con restricciones y medidas de cuidado, este escenario podría ser reversible. Es decir, las autoridades estarán al tanto de la eficacia de las medidas y podrían llamar a un cierre de nuevo si los casos de contagio resurgen.
Por Rossmary Valladares