Es vital proteger nuestro corazón de las batallas emocionales, ofensas, rechazo y todo aquello que pudiera atentar contra la salud espiritual y emocional de nuestro corazón; es tan importante que tenemos una norma que proviene de Dios en Proverbios 4:23 “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida”. De todo lo que guardes, lo valioso, atesorado; guarda, cuida y protege la fuente de creatividad, que genera vida; te garantizará la plenitud en tu vivir día a día, evitando así que sean las emociones las que alteren tu destino.
Cuando somos victimas de la ofensa; sino tenemos el corazón blindado; automáticamente viene la contaminación generando destrucción, rompemos nuestra relación cotidiana con Dios y además con nuestro núcleo familiar.
La falta de Perdón tiene consecuencias a nivel espiritual, emocional y física. Cuando no perdonamos se corta toda comunicación con la verdad, emocionalmente te sientes culpable, triste, solo, angustiado y hasta enfermo físicamente. Además trae remordimiento, resentimiento, falta de paz, opresión, deseos de venganza, obstinación y la amargura.
Solo un corazón transparente, guardado y gobernado por el Dios puede entregar en la cruz toda ofensa para recibir la incomparable capacidad de libertad que genera un poder mayor aún, como lo es perdonar a nuestros ofensores.
¿Cómo saber si tenemos falta de perdón?:
- Tener frecuentemente pensamientos de venganza en la mente (corazón)
- Alegrarse cuando algo malo le sucede a nuestro ofensor.
- Siente dolor al recordar la causa de la ofensa.
- Desvalorizar totalmente a su ofensor.
- Tener síntomas fisiológicos al recordar o ver al ofensor.
¿Cómo perdonar?:
- Es una decisión, se trata de alinearse con Dios. (Mateo 18:35)
- Haz una lista de personas y cosas que te han herido durante tu vida.
- Arrepiéntete por albergar rencor en tu corazón y hacer juicio.
- Expresa el perdón de forma verbal. (Santiago 5:16)
- Renuncia a mantener dentro de ti el resentimiento, amargura, odio y falta de perdón.
Por Andreina Fersaca
Altar7.com