El pastor estadounidense Andrew Brunson, quien en el año 2016 fue encarcelado en Turquía por una serie de señalamientos que lo culpaban como conspirador del gobierno, específicamente terrorismo y espionaje, se encuentra residenciado en Estados Unidos desde octubre del año pasado, luego de que su país de origen ejerciera presión para que lo liberaran.
Brunson no se ha detenido en predicar el mensaje de Jesucristo y recientemente se dirigió a la Comisión de Libertad Religiosa Internacional de los Estados Unidos en Capitol Hill, con el propósito de exteriorizar su preocupación en cuanto a las señales que ha recibido de la posible amenaza a aquellos que profesan el amor de Cristo en Turquía.
Aunque aún en esta nación existe libertad de culto, en comparación con otros países, el pastor manifiesta que «todas las señales apuntan a este cambio pronto», además dijo que hasta 50 familias cristianas extranjeras, entre ellas muchos líderes de la iglesia, han sido deportados de Turquía en los últimos años, la razón es porque el gobierno de Erdogan los ve como una «amenaza para la seguridad nacional», mientras que los medios de comunicación más amplios están «uniendo» iglesias y organizaciones terroristas «sin ninguna evidencia», dijo.
Entre su discurso dirigido a una cantidad significativa de personas cristianas y líderes, acusó nuevamente al gobierno turco de continuar esparciendo mentiras sobre él en Turquía. «El ministro de Relaciones Exteriores todavía se refiere a mí como un espía en público y me llama ‘Agente Brunson'», dijo, y agregó: «Sé que el gobierno turco, especialmente en los niveles más altos, sabía que yo era inocente».
Por Andreina Fersaca
