Dios siempre está cerca de nosotros, cuando lo buscamos constantemente hallaremos en él la paz que estamos buscando, la respuesta a nuestras interrogantes y el milagro que estamos esperando, pero es importante que mantengamos una comunicación constante se trata de una conversación diaria basada en amor y rendición.
La Palabra de Dios dice en Isaías 55:6 “Busquen al Señor mientras se deje encontrar, llámenlo mientras esté cercano”, esto no quiere decir que Dios no esté cerca siempre, sino que somos nosotros los que nos alejamos de su presencia. Las preocupaciones, las tereas diarias, el trabajo y la falta de fe nos hacen caer en la rutina y descuidar esa comunicación con Dios.
Nunca es tarde para buscar a Dios; él es paciente y amoroso, y siempre estará dispuesto a escucharnos cuando queramos ir a su presencia, sin embargo la decisión debemos tomarla ahora. La razón es porque apartados de él nada podríamos hacer y no necesitamos en todo momento su dirección al camino correcto. Si no mantenemos una comunicación directa con nuestro Padre Celestial, su voz no sería escuchada y se apartará de nosotros.
“El Señor estará con ustedes, siempre y cuando ustedes estén con él. Si lo buscan, él dejará que ustedes lo hallen; pero si lo abandonan, él los abandonará”. 2 Crónicas 15:2 En la Palabra de Dios encontramos la promesa que indica que si buscamos al Eterno con todo nuestro corazón él estará allí para escuchar nuestro clamor.
Muchas personas sólo buscan la presencia de Dios cuando tienen algún inconveniente, cuando se sienten mal, o cuando su vida no anda bien, pero es necesario que entendamos que un corazón conscripto y humillado el Señor no lo desprecia y siempre debemos llegar a su presencia con un agradecimiento por la vida, por la provisión, la sanidad y por todos sus regalos.
“Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón”. Jeremías 29:13.
Por Andreina Fersaca