Esta generación está escuchando por primera vez en su vida sobre la guerra. Este conflicto entre Ucrania y Rusia está causando miedo en muchos niños. Quizás como padres evitamos el tema frente a ellos, pensamos que no les afecta, cuando simplemente no sabemos qué decir.
La realidad es que están al tanto de lo que sucede, en el colegio, en la televisión, en las conversaciones de los adultos, las redes sociales, ellos están expuestos, ellos saben lo que está pasando en el mundo.
Debemos recordar que discipular a nuestros hijos no sucede en un vacío separado del resto del mundo. Podemos usar esta situación no solo para calmar los temores de nuestros hijos, sino también para ayudarlos a ver este tipo de evento mundial a través de una lente bíblica.
Hablar de lo que está pasando. Fomente conversaciones sobre el tema en casa, investigue cuánto saben y explique de acuerdo a su edad lo que sucede. No necesita ser experto para esto, solo esté dispuesto a seguir una conversación con sus hijos.
Ayude a los niños a sentirse seguros. La pregunta número uno para la mayoría de los niños es: “¿Va a haber guerra aquí?” Mire en un mapa y muéstreles dónde están Ucrania y Rusia en relación con el lugar donde vive. Recuérdeles que Dios tiene el control de todo el mundo. Lean el Salmo 91 juntos como familia y ayuden a su hijo a depender de la protección de Dios. Asegúreles que aunque no tenemos control sobre lo que sucede en el mundo, podemos confiar y depender de Dios pase lo que pase.
Evite la cobertura continua de noticias. Una clave para ayudar a disminuir la ansiedad de los niños es limitar su exposición a los medios. Sea muy selectivo acerca de cuánto ve su hijo.
Señale hacia Jesús. Recuerde a los niños que las guerras suceden porque nuestro mundo está quebrantado por el pecado. Este no fue el diseño de Dios para las personas o nuestro planeta. Dios se preocupa por las cosas difíciles que están sucediendo en el mundo y se entristece cuando ocurren actos pecaminosos (Isaías 63:10). Él envió a Jesús a la Tierra para hacer un camino para que el pecado sea perdonado para que todo pueda volver a estar bien algún día. Nuestro mundo solo será 100% pacífico después de que Jesús regrese y Dios haga nuevas todas las cosas. El Evangelio es la única esperanza que tiene nuestro mundo.
Recuérdeles a sus hijos que Dios está muy activo en medio de la guerra y el caos. Dios está con nosotros en medio de ella.
Fuente: awanalatinoamerica.org
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