Jesús en sus enseñanzas compartió lo que se requiere para vivir una vida significativa, hizo uso de diversos tipos de enseñanzas tales como el matrimonio, el perdón, el amor, el reino de Dios, entre otras. A través de cada historia Jesús nos dejó aspectos fundamentales de la fe cristiana que debemos poner en práctica en nuestro diario vivir.
Entre algunas de las enseñanzas de Jesús más importantes encontramos las siguientes:
1.- Amar a Dios de todo corazón:
El primer mandamiento y el principal, como se afirma en Deuteronomio 6:5, es amar de todo corazón a Dios, lo que incluye: el corazón, el alma, la mente y las fuerzas. Jesús no olvidó este mandamiento, quien reiteró su importancia varias veces, incluso en su conversación con un maestro de la ley en Marcos 12:29-30. La intensidad de nuestro amor por Dios debe ser enormemente poderosa, y no debe ser afectada por nuestras emociones o las situaciones adversas en las que nos encontremos. Este amor surge de una relación inquebrantable de Dios hacia nosotros, como lo demuestra su entrega desinteresada de enviar a su Hijo Jesucristo, para concedernos la vida eterna.
2.- Perdonar y ser perdonado:
Las enseñanzas de Jesús enfatizan la importancia del perdón, ya que nos insta a extender el perdón a los demás, así como nuestro Padre celestial nos perdona a nosotros. Evitar perdonar y ser perdonados puede tener efectos adversos en nuestra salud mental y emocional. Al aceptar el perdón, podemos liberarnos de cargas y pensamientos negativos hacia personas que a lo mejor nos han herido, además de fomentar la tranquilidad y facilitar el proceso de sanidad.
«Porque, si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre celestial», Mateo 6:14. En nuestra vida diaria, podemos incorporar el perdón olvidando daños del pasado, buscando la paz y cultivando una mentalidad de empatía y piedad.
3.- Buscar primero el Reino de Dios:
En el Sermón del Monte, Jesús impartió una lección vital a sus discípulos, instándolos a tener como objetivo principal la búsqueda del reino de Dios y su justicia. Al abrazar esta enseñanza, nos debemos sentir motivados a poner nuestra relación con Dios en primer lugar dejando a un lado todas las demás preocupaciones y afanes. Al entender esta enseñanza de Jesús podemos lograr un mayor significado a nuestra existencia: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas”, Mateo 6:33.
4.- Predicar su Palabra y hacer discípulos:
El mandato que nos dio Jesús es proclamar su mensaje de salvación a las personas de todas las naciones. Así como un día recibimos el mensaje de la salvación a través de Jesús, es nuestro deber salir y discipular en el lugar donde nos encontremos, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, e instruyéndolos a seguir todas sus enseñanzas según Jesús ordenó en Mateo 28:19-20.
Jesús nos encargó esta importante misión y con la ayuda del Espíritu Santo, tenemos la capacidad de bendecir a quienes están entre nosotros. Cuando llevamos el mensaje de Jesús, somos participes del cumplimiento del regreso de Cristo para establecer un reinado eterno en la tierra. Al difundir el evangelio a quienes nos rodean, estamos difundiendo la esperanza que solo se puede encontrar en Cristo Jesús.
5.- Vive como un ejemplo del amor de Dios:
Jesús enseñó a sus discípulos a vivir como buenos ejemplos del amor y bondad para todas las personas. Además Jesús enseñó a sus discípulos a amar y orar por sus enemigos. Les dijo que es difícil amar a aquellos quienes no los tratan bien: pero que ellos eran diferentes a las demás personas porque habían aprendido a amar a quienes son difíciles de amar. «Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante». Efesios 5:2
Por Rossmary Valladares